Por Ricardo Salomé, Presidente de Asociación Concesionarios de la República Argentina.
El nombramiento de la ministra Silvina Batakis, y sus primeras decisiones, han mostrado hasta el momento una clara intención de priorizar el equilibrio fiscal, por lo tanto, creemos que, una vez que se logre superar la incertidumbre de estos días, se van a acomodar las variables macroeconómicas y paulatinamente mucha gente se va a decidir a comprar más autos. Más allá del ruido de estos días convulsionados, seguimos manteniendo las previsiones iniciales del año de que finalizaremos el mismo con 200.000 unidades de patentamientos nacionales y otras 200.000 importadas. Toda la cadena de valor está haciendo un gran esfuerzo para ello y también para que el año que viene podamos alcanzar una expectativa de crecimiento del 10% con respecto al mercado de los 400.000 de 2022. La capacidad de crecimiento del sector es grande, hoy solo estamos a un 40% del mejor momento que tuvimos en cuanto a volúmenes (año 2013) por lo que creemos que hay un desarrollo importante para hacer de acá en adelante, más si consideramos que las concesionarias están preparadas para tener entre 700 a 750 mil autos al año en estructuras. ACARA comprende hoy a 2.500 concesionarios que le dan trabajo a 75.000 personas en forma directa, lo que se traduce en 225.000 empleos totales, directos e indirectos, en un sector que representa el 2,5% del PBI. Queremos y podemos ser el motor de arranque de la economía, por eso tenemos fe de que vamos a cumplir con los objetivos y hasta podemos superarlos. Entendemos la incertidumbre cambiaria de estos días, que lleva que mucha gente se paralice pero esta crisis también puede ser una verdadera oportunidad. Quien tiene algun ahorro puede hacer hoy un gran negocio, haciendo valer su «dólar canuto», a $340 lo que le va a dar la posibilidad de comprar un vehículo un 30/35%% más barato en dólares de lo que estaba hace pocas semanas. Más allá de algún vehículo puntual, que puede tener alguna demora, hay disponibilidad de los modelos que se fabrican en el país con lo cual, para el que esté dispuesto a adaptarse a la oferta existente, hoy es un gran momento para comprar un vehículo, que además de disfrutarlo, le va a permitir preservar valor. El argentino es fanático de la movilidad y hoy puede disfrutarla, optimizando considerablemente sus ahorros y mantenido su valor. Otro punto muy interesante es que existen financiaciones en muchas terminales, que son buenas oportunidades para sacar un millón y medio o dos millones de pesos a tasas reducidas y totalmente subsidiadas por las marcas. Si lo comparamos con Estados Unidos y España, están muy baratos los autos en dólares en nuestro país, y hoy mas que nunca , porque hay un problema grave en el mundo ya que la oferta está muy restringida por la falta de microchips, situación que se podría subsanar recién en el 2023. Vemos en el Gobierno una clara conciencia de los beneficios de seguir fomentando la producción nacional, y va a incrementarse. Hoy el 55% de los autos que se patentan son de origen nacional, algo que siempre fue un viejo anhelo del sector y que hoy es una tendencia que ha venido para quedarse.